¡Bienvenidos!



¡Hola! Somos Lucía y Marta, unas grandes amigas Directioners a las que les apasiona escribir. Aquí escribiremos una novela de nuestro pequeño duende irlandés Niall Horan, pero tenemos pensado escribir una con cada chico, así que cuando lo hagamos, os dejaremos el link para que os paséis. Esperamos que os guste y disfrutéis leyendo. ¡Ah! Y comentad, que es gratis :3
Por ahora solo tenemos esta y otra de Louis Tomlinson

martes, 26 de noviembre de 2013

MARATÓN: Capítulo 10 ~

*Un par de horas después*
-Despierta dormilona - noté el aliento de alguien en mi oído. Fui abriendo los ojos hasta encontrarme con la cara de Niall a escasos centímetros de mi cara. Él sonrió. -Hola.
Le dí un pequeño beso y me incorporé en el sillón. No había nadie más en el salón, supongo que los demás estaban en el jardín o en las habitaciones.
-No soy una dormilona. Fuiste tú el que te quedaste dormido junto a los demás - repliqué mientras le tocaba la nariz. -Estabas muy mono dormidito - reí.
Él solo sonrió.


*Narra Niall
Es tan bonita. Cada día estoy más enamorada de ella. Ojalá pudiera demostrarle qué tanto la quiero. Osea, ella ya lo sabe. Pero es que la amo tanto. Necesito hacer algo por ella. Pero no se el qué. Sí, lo sé, hoy estoy demasiado romántico, pero es que... el amor me vuelve loco. Nunca había estado tan enamorado. Ni Zoe ni leches, ella es el amor de mi vida. Es a _____ a quien quiero.
- ¿En que piensas? - me preguntó sacándome de mis pensamientos.
-En ti - sonreí. Y no era mentira.
-Anda vamos a buscar a los demás - respondió ella mientras me daba un tierno beso. Sí, de esos que te dejan sin aliento.
Fuimos al cuarto de Louis, donde se estaban quedando todos menos Zayn y yo, que teníamos otra habitación. Aunque yo ahora dormía con ____ y Brithany con Zayn. Entramos en la habitación. Sí, ahí estaban todos, Brithany incluida.
-Hola chicos - dijo mi novia. Que bien suena, reí.
-¡Bella durmiente! - saludó Liam. Vino corriendo hacia ____ y arrodillándose ante ella le cogió una mano y se la besó.
-Oh príncipe, que halagador por tu parte darme este cálido saludo - le siguió el juego ella aguantando la risa.
Yo reí. No estaba celoso. No de Liam. Quizás si hubiera sido Harry, pero siendo él no tengo nada por lo que preocuparme.
Liam se levantó y besó su mejilla. Los dos rieron.
-Veo que despertaste. ¿Y esa siesta a que vino?
-¡Pero si fue culpa vuestra estaba yo con Brithany hablando de... - su amiga le miró. Ella tragó saliva y sonrió. - de una cosa, y cuando volvimos al salón estabais todos dormidos.
-O no. A lo mejor solo nos estábamos haciendo los dormidos - propuso Harry.
-Ya, claro - ironizó ____. - Por eso cuando me acurruqué junto a Niall, ni se enteró.
Yo me sonrojé. La verdad es que me había despertado con ella casi encima mío, y me había preguntado ochocientas mil veces cuando había venido.
-Que va. Sí que me enteré.
-Pero si tú hasta roncabas. Yo sí que me enteré. Vino justo una hora después de que te quedaras profundamente dormido - me corrigió Hazza.
-No sabes mentir - confirmó Louis negando con la cabeza. -Te tendré que dar algunas clases Hazza... - dijo elevando las cejas.
-Recógeme esta noche. Me las daras a la madrugada, me concentro mejor...dijo Harry con un tono pícaro.
Todos reímos. Es cierto que las fans estaban siempre diciendo que entre Harry y Louis había algo especial. Además, les llamaban algo así como Larry Stylinson. A ellos no les importaba, así que siempre estaban bromeando sobre eso.


*Narra _____
Nos estábamos riendo de la conversación entre Hazza y mi hermano. Por su parte, el bad boy de Bradford estaba calladito, igual que mi mejor amiga. Los demás seguían hablando de tonterías, algo de que Niall se sonrojaba siempre. No sé de que se quejaban, si así está muy mono, pero bueno.
-Oigan, me aburro. Vamos a hacer algo.
-¿Piscina otra vez?
-No. Algo diferente. No sé... vayamos a algún sitio.
-¿Al parque, al cine, al centro comercial,....? - propuso Liam.
-No sé. Tiene que ser algo guay. Es que quiero hacer algo diferente, guay.
-Pues espera cuatro días - respondió Harry.
Los demás chicos sonrieron.
-Pensaba que no os acordaríais - confesé.
-¿Cómo no podíamos acordarnos de algo así? - preguntó mi mejor amigo.
La verdad es que tenía unos amigos increíbles.
-Gracias chicos. Ahora que todos lo sabéis, quería pediros mi regalo de cumpleaños. Solo quiero uno.
-Adelante. Haremos lo posible para que se cumpla - contestó esta vez mi hermano.
Brithany me miraba fijamente.
-No quiero fiestas. Ni regalos, ni nada -les dije evitando la mirada de mi amiga.
-Ya hemos hablado de esto. Haremos una fiesta nosotros solos - replicó Brithany, metida en la conversación por primera vez.
-No quiero.
Brithany suspiró.
-Vamos _____. No fue para tanta traumatización.
-¿Y tú que sabes? Aunque solo hubiera sido eso, a mi me afectan esas cosas. Pero es que no fue solo eso. Pasaron más cosas, pero no las quería contar. Así que no, no quiero fiestas. No se hable más.
Los chicos me miraban atónitos. Por supuesto, yo no les había hablado de Scott. Ni quería hacerlo. Mi mejor amiga se calló, tragándose su orgullo.
-¿De qué hablas? - rompió el silencio mi hermano.
-Nada.
-Oh venga. Somos de fiar - dijo Liam.
-Por favor -susurró Niall.
Harry solo me miraba. Él sí lo sabía. Recuerdo esa noche como si fuera ayer.


*Flashback _____*
-Esto... - sonrió y se acercó a mi hasta unir nuestros labios. Intenté separarme de él, pero me apretaba fuerte junto a él, haciéndome daño. Minutos después, conseguí soltarme de él y le di una bofetada mientras dejaba caer unas cuantas lágrimas. Me di la vuelta y subí corriendo a mi cuarto, ignorando las preguntas de los chicos y de Bri. Bueno, no de todos los chicos. Faltaba uno, Harry. No sabía donde estaba, pero tampoco me importaba. Solo quería llegar a mi habitación cuanto antes para llorar y llorar. Era increíble. En tan solo unos minutos, había conocido a un chico, dado mi primer morreo, y casi había sido violada. Scott me había quitado el vestido ignorando mis lágrimas, quedando en ropa interior. Estaba apunto de cometer una locura, cuando Harry apareció y empezó a pegarle. Yo me coloqué el vestido rápidamente y salí corriendo de allí. Y es que no había nadie en el jardín que pudiera ayudarme. Solo él, mi mejor amigo.

Unos minutos después, tocaron a mi puerta innumerables veces. Pero no podían abrirla, estaba cerrada con llave. Me miré en el espejo. Tenía algunos arañazos en el cuerpo. No me molesté en curarlos. Simplemente me hundí en la cama a llorar de nuevo. Entonces, noté la respiración de alguien más en el pequeño cuarto. Levanté la cabeza y ahí estaba Harry.
-¿Cómo entraste? - pregunté quitando algunas lágrimas de mis ojos. Él tenía un corte en la pierna, cerca de la rodilla y múltiples arañazos, igual que yo. Fui al baño antes de que pudiera responder, cogí el botiquín y volví a la cama para empezar a curarle.
-Por la ventana -respondió él señalando la ventana abierta. Yo me levanté y la cerré. -¿Estás bien?
-No.
Cogí algodón y lo estampé en su pierna. Lágrimas caían por mi rostro. Seguía sin creérmelo, y contar lo que había pasado en voz alta lo hacía más real. Y la idea de que había pasado de verdad, me asustaba, aunque así era. Harry me quitó el algodón de las manos, lo tiró al suelo y me abrazó.
-Tranquila -me consoló. - Estoy aquí, y esto no va a salir de nosotros, ¿me lo prometes? Será nuestro secreto.
-Te lo prometo.
*Fin del flashback de _____*


-Me voy a comer.
-Acabas de comer. Ni si quiera yo tengo hambre - repuso Niall.
-Hace más de dos horas que comí. Tengo hambre.
Bajé corriendo a la cocina. Abrí despensas. Necesitaba chocolate. Nada, no había chocolate. Subí a mi cuarto. Busqué entre cajones y armarios y hasta en una pequeña nevera que tenía junto a mi cama. Pero tampoco, no había ni rastro de algún trozo, por pequeño que fuera, de mis tabletas de chocolate. Me senté en la cama, pensando dónde podrían estar. En ese momento, entró alguien a mi habitación. Temía mucho saber quien era, pero estaba en lo cierto, aunque venía acompañado. Eran Harry y Niall.


*Narra Harry.
Odio ver a _____ así. Sé muy bien por lo que pasó, y entiendo perfectamente por qué no quiere que hagamos fiesta alguna. Incluso estoy de acuerdo, no me gustaría vivirlo otra vez. Aunque supongo que no sería yo quien estuviera a su lado esta vez, sino su novio, Niall. ____ se fue a la cocina, segun ella, a comer. Aunque yo sabía que solo buscaba chocolate. Esa era su debilidad. Si tenía ansiedad, solo comía chocolate. Se hinchaba hasta tener un grave dolor de estómago. Por eso es que yo tenía todo el chocolate de la casa. Fue pura casualidad, porque esta mañana mientras preparaba el desayuno, vi cuatro tabletas de chocolate en la despensa. Y decidí cogerlos por si acaso.
Tenía un mal presentimiento. Y ahora se hizo realidad, y _____ no tiene chocolate.


Decidí ir en su busca, seguramente necesitaba hablar conmigo.
-Voy a hablar con ella - dije saliendo de la habitación.
-Espera, te acompaño.
Oh, no. Niall no puede venir. Nadie sabe lo que verdaderamente ocurrió menos yo, así que no podremos hablar de ello. ¡Y menos si es Niall! A _____ no le gustará. Caminé hasta su cuarto, ya que recientemente se oían pasos desde el cuarto de Louis. Toco la puerta y entramos. Ella no tiene palabras. Creo que es porque Niall está conmigo. Si es que lo sabía, no debería haber venido, pero es su novio, no lo podía echar. Sospecharía y seguramente _____ no quiere que lo sepa.
-Hola - saludó Niall.
-¿Que pasa?
La miré. Ella más que nadie debería saber para qué estoy yo aquí. Soy el único que puede ayudarle.
-La pregunta es qué te pasa a ti. Nos debes algunas explicaciones -contestó su novio. - Creo que nos las merecemos, ¿no?
<<Yo ya lo sé todo Niall, no sé por qué te molestas>> pensé.
-No negaré que hay un por qué por el que no quiero celebrar mi cumpleaños. Pero no lo quiero decir, y punto. Nadie me va a hacer cambiar de opinión. Pero Niall...
-¿Qué? - le preguntó esperanzado.
Ella me miró. Vale, ahora vendría una situación incómoda.
-Déjame a solas con Harry, por favor. Solo quiero hablar con él.
La cara de Niall daba pena. Estaba echo polvo.
-Vale.
-Niall...
Él sonrió falsamente, pues todavía le salían lágrimas que rodaban por sus mejillas.
-Lo entiendo, _____. Hay cosas que solo son entre mejores amigos. Está bien. Avísanos.
La chica asintió y Niall salió de la habitación. Solo quedamos ella y yo. Es hora de viajar en el tiempo.


*Narra _____
Eché a Niall de mi habitación. Casi me da algo cuando vi su cara llena de dolor y tristeza, pero debe entender que precisamente esto, no lo puede saber nadie. No quiero darle lástima, ni que se vuelva sobreprotector. No quiero que nada cambie. No sé qué decirle a Harry, pero tampoco es que tenga mucho tiempo, las lágrimas ya salen por mis ojos. Él se acerca a mí y me abraza. Me acerco más a él hasta quedar casi encima suyo. Él me acaricia el pelo.
-Tranquila, ya pasó. Mírame a los ojos.
No obedecí. Me hundí más en su pecho intentando ocultar mis ojos rojos, llenos de lágrimas. Él me cogió la cabeza y me obligó a mirarle.
-No va a volver a ocurrir, ¿de acuerdo? No te dejaré sola ni un minuto.
Yo asentí, aunque no estaba para nada convencida. Realmente no quería pasar por eso de nuevo. Fue algo que nunca olvidaré, siempre me dejará marcado.
-Harry -le llamé con la voz rota.
-Dime princesa.
-¿Te puedo hacer una pregunta?
-Claro dime.
-¿Cómo fue que apareciste tan de repente cuando...? -tragué saliva. Él me calló poniendo un dedo en mi boca.
Mi amigo se sonrojó.
-Bueno, quizás y solo quizás, estaba enamorado de ti y por eso no te quitaba el ojo de encima...
Yo le miré sorprendida. ¿Tanto tiempo llevaba detrás mío? Bueno, fue casi igual que cuando me enamoré de Niall.
-Lo siento. Me debí dar cuenta antes.
-No pasa nada, _____. Ese no es el tema. Será un cumpleaños especial, harán 18 años que nació una personita especial que volverá loco a todo el mundo, que tendrá un gran corazón y tendrá unos amigos ejemplares - me dijo Harry haciendome cosquillas en la barriga. Eso me hizo sonreír.
-¿Amigos ejemplares?

-Claro, somos los mejores amigos del mundo, ¿o no?
Reí.
-Claro, tonto -besé su mejilla. -Pero Hazza, no quiero fiesta. Tengo miedo de que pase algo... -él me volvió a interrumpir.
-No va a pasar. Pero si te sirve de algo, si no quieres fiesta, no habrá fiesta. Los chicos y yo sólo queremos que lo pases bien en tu día especial. Pero tú solo piénsalo, ¿vale? Son tus dieciocho años, serás mayor de edad, celebrarás que tienes el mejor novio del mundo, rodeada de tus amigos, únicamente de tus amigos, tu familia. Solo queremos que te diviertas, y lo siento pero creo que sentarnos en el sillón a ver una película como culquier otro día, no es para nada una fiesta de cumpleaños de una chica guapa, loca y llena de amigos que cumple dieciocho años.
Sonreí.
-Quizás tengas razón. No te prometo nada, pero lo pensaré, ¿vale?
Me abrazó.
-Haremos lo que quieras, _____.
Le abrazé más fuerte.
-Eres el mejor amigo del mundo mundial de las croquetas, ¿lo sabías?
-Solo sé que soy la mejor croqueta del reino de tu mundo, _____.
-No quiero que te vayas de ese mundo.
Sonreímos mientras nos separamos. Sí, estamos como cabras.
-Claro que no me iré, no podría abandonar a mi unicornia.
En pocos segundo estábamos riendo a carcajadas. Da gusto tener amigos así.
-Oye, volvamos con los demás - propuse. -Debo hablar con Niall. No le quiero decir nada, pero creo que debe saber que ya estoy bien.
-Me parece lo mejor -contestó levantándose de mi cama.
Fui a salir de la habitación cuando recordé algo.
-Ah, y croqueta mía - le llamé. Él rió. -Gracias por todo lo que pasó o pudo haber pasado esa noche.
Mi amigo sonrió.
-No hay de qué, unicornia mía. Sabes que no te dejaré sola.
Sonreí y me fui en busca de mi novio. En la habitación de los chicos no había nadie, estarían abajo. Baje con cuidado las escaleras, y me encontré con Harry buscando a los chicos.
-Aquí no están - me dijo Harry.
-Vale, si fueras un grupo de gente auténticamente loca, y un irlandés hecho polvo con complejo de glotón, ¿donde estarías?


*Narra Harry
-Pues... ¿En Nando's? - propuse yo.
-Conociendo a Niall... seguramente - sonrió. Yo la imité.
-Espera, voy a cambiarme. No pienso salir así a la calle - señaló su ropa. Ese pantalón corto y esa camiseta le quedaban genial, pero era algo como para estar en casa.
-De acuerdo. Te espero aquí, no tardes unicornia - sonrió.
-Vale croquetita.
-Unicornia - le llamé.
-Dime croquetita.
-Tenemos los apodos más normales del mundo - reí.
-Lo sé - también rió. Se dio la vuelta para ir a cambiarse pero volví a llamarla.
-Unicornia.
-Dime croquetita.
-¿Me das un beso? - pregunté. Señalé mi mejilla. Ella sonrió.
-Estás muy mono así. Pareces un niño pequeño - dijo acercándose a mí mientras reía dulcemente.
-Soy TU niño pequeño - le corregí. Se sentó a horcadas sobre mí y rodeó mi cintura con sus piernas. Mala idea... - _____... Esta posición es un poco...
-¿Pornosa? - me interrumpió.
-¡Oye! - le reñí - Las señoritas no hablan así. Y sí; sí que es un poco pornosa.
-Bueno... soy una señorita especial - dijo. <<Y tanto que eres especial...>> pensé - ¿Quieres tu beso o se lo guardo a Liam?
-¿Liam? - pregunté confuso.
-Sí... no sé - rió - Fue el primer nombre que me vino a la cabeza - se encogió de hombros. Yo acerqué mi mejilla a sus labios y dejó en ella un suave y tierno beso.
-Gracias princesa. Ve a cambiarte - sonreí. Ella también lo hizo y se bajó de mí para ir a cambiarse.
Diez minutos después bajó con esta ropa: http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo_23/set?id=98383206
Me encanta como le queda.
-¿Vamos? - pregunté. Entrelazó su brazo con el mío.
-Vamos - sonrió.
Salimos de la casa y cerré la puerta tras nosotros. Vi que _____ cogía su móvil y escribía algo en él.
-¿A quién escribes? - pregunté curioso.
-¡Entrometido! - gritó _____ con una sonrisa y alejando su móvil de mí.
-Pues la verdad es que sí... - admití. Ella rió y me contagió su risa.
-Le preguntaba a Brithany que dónde estaban.
-¿Y qué te dijo?
-Iban con Niall así que...
-Nando's - la interrumpí. Ella rió.
-Sí. Venga, vamos - caminó más rápido.
Unos diez minutos después llegamos a Nando's y vimos a los chicos firmando autógrafos y sacándose fotos.


*Narra _____
La croqueta y yo llegamos a Nando's. Los chicos como siempre estaban con sus fans. Sonreí y me senté junto a Brithany en una mesa tras saludarla, mientras Harry iba con los demás chicos a firmar autógrafos. Niall se dio la vuelta y me miró. Le saludé con la mano. Él me sonrió y me guiñó un ojo, lo que hizo que me sonrojara levemente. En realidad, Niall era un poco bipolar. Es decir, en casa estaba llorando porque me quedé a solas con Harry para hablar de... eso... y ahora actúa como si nada.

Estaba sumergida en mis pensamientos mientras Brithany hablaba y hablaba sin parar de algo a lo que yo no prestaba atención. Sólo miraba a Niall con una sonrisa de estúpida en la cara. Pude ver que mi pequeño irlandés posaba con una fan para una foto, cuando esa zorra agarró a mi novio y juntó sus labios. Ahora sabía lo que Niall sintió cuando me vio besarme con Harry. No pude evitarlo y una lágrima resbaló por mi mejilla. Me levanté ignorando a mi mejor amiga y fui hasta el baño, mientras notaba que Niall me seguía con la mirada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario