~Capítulo 22

Me paré en seco mientras palidecí.
-¿Cómo has conseguido mi número?
Niall se giró hacia mí en un intento de buscar respuestas. Procuré vocalizar el nombre de Ryan para que supiera que era él, pero creo que no lo entendió, pues me miró confuso. Mientras, los demás chicos se giraron para ver qué ocurría. Niall les miró encogiendo sus hombros.
-Eso no importa preciosa. ¿Estás con tu novio?
-No, no estoy con mi novio - mentí mirando a este.
-¿Y con la banda de inútiles?
-Tampoco estoy con los demás, estoy sola.
-No me mientas -dijo furioso.
-No estoy mintiendo -dije asustada. -¿Qué quieres?
-Te voy a ir a recoger en dos minutos, y como no estés sola... - paró de hablar para carcajear, y luego continuó: -... serás mía nena.
Temblando, miré a Niall soltando algunas lágrimas. No podía hablar, sabría que estaba con ellos, y eso solo serían más problemas con la prensa. Esto fue un error mío, y lo iba a arreglar yo.
-Nunca seré tuya. Mi corazón tiene dueño. Tanto Niall como mis amigos y mi hermano. Siento decirte que a ti no te pertenece ni un trocito capullo.
-Te arrepentirás de eso preciosa. No te preocupes, me encargaré de castigarte -volvió a reír. -Estaré allí en minuto y medio.
Y finalizó la llamada.


Guardé el móvil en el bolsillo y Niall en seguida me preguntó:
-¿Quién era? ¿Qué quería? ¿Estás bien? ¿Por qué lloras?
-Estoy bien. Era... -dudé. Realmente no quería que tuvieran problemas por mi culpa. Y menos en un lugar público. Tenía que deshacerme de ellos como sea, en menos de dos minutos. No podían saber que era Ryan. - era mi tío. Mi tío... Jacob. Vive en Francia y quería verme.
-¿El tío Jacob quiere verte? Iré contigo. Así me dará un regalito como cada vez que le vemos - sonrió Louis. Oh mierda, ¿y qué hago ahora?
-No... es que quería verme por una cosa de tu cumpleaños. Es una sorpresa y no puedes venir -mentí.
-¿Y por qué lloras? - preguntó Niall no muy convencido.
-Es que... lo echo de menos. Es el único familiar que SIEMPRE nos trató y nos trata bien -sonreí. Esto último era verdad. Me da pena que lo esté utilizando para una mentira. Bueno, al menos es para algo bueno. Estoy ayudando a los chicos, creo.
-Está bien. ¿Cuándo vais a veros? -me preguntó Louis algo desilusionado.
-Me recoge en... -miré el reloj. Había pasado un minuto desde que hablé con Ryan. Tenía que darme prisa. - pues dentro de nada.
-¡Fantástico! Le podré saludar.
-¡No! -respondí rápidamente. A lo que Louis me miró extrañado. -No... no puedes porque va a venir en coche, y no va a poder bajarse. Ya sabes cómo son los aparcamientos en Francia...
-No. ¿Cómo son?
-Pues... complicados - contesté. No sé por qué dije eso, ni yo misma lo sabía. Pero tenían que irse pronto. ¡En cualquier momento llegaría Ryan!
-Bueno, pues nos veremos luego, supongo -dijo Niall. Me da tanta pena verlo así...
-Sí, no te preocupes. Os llamaré cuando termine.
En ese momento, sonó una pita del coche. MIERDA.
-Eh... me voy ya. Adiós. Les amo, ¿sí? No lo olviden -me despedí con algunas lágrimas en los ojos. No sabía que iba a pasar ahora, pero si seguía llorando delante de ellos algo no iba a acabar bien. Así que salí corriendo al coche negro que me esperaba en la entrada, a tan solo unos metros de mí. Subí al coche directamente, y suspiré, preparándome para lo peor.


-Te lo pregunté. Dos veces. Y me mentiste -dijo Ryan por enésima vez. Había arrancado nada más subirme al coche, y nos habíamos dirigido a un lugar no muy lejos, pues veía la Torre Eiffel desde aquí. Nos habíamos quedado dentro del coche, en medio de una carretera por dónde rara vez pasa un coche. Yo estaba acurrucada en uno de los asientos de atrás, mientras que Ryan estaba sentado en el asiento del conductor mirándome fijamente.
-Lo siento...
-¡NO! ¡NO DIGAS LO SIENTO JODER! ¿POR QUÉ ME MIENTES? ¡LAS PERSONAS QUE SE AMAN NO SE MIENTEN!
-¡YO NO TE AMO! -dije yo también gritando.
Él se puso más furioso aún, si es que se podía.
-¡Sí me amas! Lo que pasa es que no te has dado cuenta todavía. Pero no te preocupes nena, con un par de besos míos caerás rendida a mis pies -sonrió pervertidamente.
-Estás loco -escupí. -Sabes que amo a Niall. Ni te esfuerces en compararte con él. ¡ERES MIERDA INCLUSO AL LADO DE UN OGRO!
Rió fuertemente.
-Insúltame todo lo que quieras -carcajeó. Se acercó más a mí, pero yo no me podía alejar más de él. Estaba lo más pegada posible al respaldo del asiento y a la ventanilla. Cuando estuvo a la distancia de su agrado, me susurró con voz grave: -Aunque prefiero que te ahorres los insultos para cuando estemos en mi apartamento. Eso me pone de verdad.


No podía abrir la puerta, pues estaba con el seguro puesto. Así que lo único que pude hacer fue darle un fuerte empujón con mis largas piernas en el pecho.


-Estás enfermo - escupí.


-Nena, como no dejes de insultarme, te haré mía aquí mismo - dijo burlón y con una sonrisa asquerosamente pervertida.


-Te odio - gruñí. Más lágrimas aparecieron en mi cara.


-Shh. No llores preciosa- acarició mi cara asquerosamente - Ahora iremos a mi apartamento a pasarlo bien juntos, ¿de acuerdo?


-¿Acaso tengo otra opción? - dije. Rió irónicamente.


-La verdad es que no - sonrió.


Le aparté la mirada y se volvió a sentar bien. Arrancó su coche, supongo que dirección a su apartamento, como había dicho.


-¿Cómo conseguiste mi número? - pregunté minutos después.


-¿Crees que eso importa? - preguntó sin apartar la vista de la carretera.


En ese momento me sonó un mensaje del móvil.


-¿Tienes tu móvil contigo? - preguntó con cierto tono de enfado.


-S... sí... - dije nerviosa. Él suspiro, supongo que intentando no cabrearse más de lo que estaba.


-Ponlo en silencio y dámelo - dijo intentando parecer amable, pero no lo era.


Saqué mi móvil del bolsillo y lo desbloqueé. Vi que el mensaje era de Niall:


Niall: Hola princesa. ¿Todo bien con tu tío Jacob? Por aquí te echamos de menos. Decidimos no subir a la Torre Eiffel para que subas con nosotros. Te quiero mucho xx.


No pude evitar soltar una lágrima al leer eso. ¿Sería el último mensaje de Niall que leería? ¿Fue la última vez que les vi?


-¿No me has oído? ¡Te dije que lo pongas en silencio y me lo des! - gritó. Lo silencié entre sollozos y se lo di - Lo siento princesa. ¿Ves cómo me pongo si no me haces caso?


-No me llames princesa - susurré con miedo.


-¿Qué?


-Que no me llames princesa - dije en un tono de voz audible.


-Te llamaré como me dé la gana, ¿de acuerdo? Para eso eres mía - dijo. Iba a contestar, pero siguió hablando - Hemos llegado.


Paró el coche y bajó de él. Me abrió la puerta, pero sin ningún sitio para poder huir.


-Como grites, intentes escaparte, o algo así, te arrepentirás, ¿de acuerdo? - dijo enfadado, para variar. Yo asentí - Así me gusta.


Me dejó espacio para que saliera y eso hice. Cerró el coche cuando ya estaba fuera, cogió mi mano y empezó a caminar, haciendo que también yo lo hiciera. Intenté retirarla, pero me apretó más fuerte aún.


-Me haces daño - susurré.


-Es por nuestro bien. No quiero que te vayas de mi lado - hizo una mueca parecida a una sonrisa.


Observé el paisaje de mi alrededor. Estábamos en medio de alguna ciudad, por supuesto, desconocida para mí. Entramos a un edificio y llamó al ascensor. Cuando estuvimos dentro pulsó el botón del cuarto piso, aún apretando mi mano. Salimos y se paró frente a una puerta con la letra 'B'. La abrió y pude ver un salón y unas cuantas puertas.


-Pasa - me ordenó. Le hice caso y entró detrás de mí, cerrando la puerta con llave - Esta es la cocina - abrió una puerta - el salón - señaló el salón que había visto previamente - un baño y nuestra habitación - indicó las dos puertas restantes.


-¿Nuestra? - tragué saliva.


-Claro. ¿Acaso pensabas que íbamos a dormir separados? - rió amargamente. Segundos después me acorraló contra la pared - ¿Te apetece que vayamos a pasárnoslo bien?


-La verdad es que no demasiado - dijo con una sonrisa irónica.


-Bueno... lo dejaremos para esta noche. Me voy - dijo. Abrió la puerta y antes de salir dijo: - Volveré tarde, pero espérame despierta, muñeca - después salió y oí que cerraba con llave.


Empecé a buscar un teléfono por todo el apartamento: en la cocina, en el salón, en la habitación, incluso en el baño, pero ni rastro.


-Mierda - susurré a la vez que volvían a aparecer lágrimas cubriendo mi rostro.


*Narra Niall


-¿Soy el único que no se traga eso de ir a ver a su tío? - pregunté minutos después de que _____ se subiera a ese coche. Estábamos todos sentados en el césped, cerca de la Torre Eiffel - Además, no me responde al mensaje.


-Tranquilo Niall, seguro que están ocupados hablando del cumple de Louis, como nos dijo - habló Brithany con una sonrisa.


-Estamos en junio, y su cumpleaños es en Navidad - dije obvio.


-Niall, dudo que se vayan a ver más veces - dijo Zayn - Él vive aquí y _____ en Doncaster.


-Pero... estaba rara... Mierda chicos. ¡Estaba llorando! - grité desesperado. Realmente algo no me convencía.


-Tranquilo Niall - me dijo Harry - Seguro que tiene la regla o algo así.


-Harry tiene razón - le apoyó Brithany - Las dos solemos ponernos sensibles y bipolares cuando tenemos la regla.


Debo admitir que eso me tranquilizó un poco, pero las cosas seguían sin cuadrarme demasiado.


-Niall, ¿te quedarías más tranquilo si Louis llamara a su tío? - propuso Liam.


-Por favor - pedí.


-Está bien - dijo Louis sacando su móvil. Marcó el número y puso el altavoz. Varios segundos después descolgaron el teléfono.


-¿Diga? - dijeron al otro lado.


-¡Hola tío Jacob! Soy Louis, ¿qué tal todo?


-¡Louis! ¡Cuánto tiempo! Todo bien, ¿y tú? Dijeron en las noticias que venías a Francia con los chicos, ¿es cierto?


-Todo bien. Y sí, aquí estamos. Es más, _____ está contigo.


-¿Qué? Louis, yo estoy solo.


-¡Mierda! Yo lo dije.... joder... - dije desesperado pasándome las manos por el pelo.


-Eh... sí, claro tío... Bueno, ya te llamaremos para vernos, ¿de acuerdo? Hasta luego - colgó.


-¿Qué está pasando aquí? ¿Dónde y con quién está _____? -preguntó Brithany preocupada y con sus ojos cristalizados. Zayn le abrazó.


-Llamaré a su móvil, a ver si lo coge alguien - dijo Harry. Empecé a derramar lágrimas. Esto me supera, no puedo. No quiero pensar qué le pueden estar haciendo.


-Tranquilo hermano. Seguro que está bien - me intentó animar Liam. Entonces Harry puso el altavoz de su móvil.


-¿Diga? - dijo una voz masculina, que a decir verdad, me sonaba.


-Ho... hola... ¿está _____? - dijo Harry nervioso.


-No. Ahora no está conmigo, ¿qué querías? - dijo con voz de enfado.


-Sólo... quería hablar con ella. ¿Le podrías decir que me llame cuando la veas? Es muy urgente.


-Claro, se lo diré. Adiós - colgó, dejándonos más extrañados aún.


-¿Soy el único al que le suena esa voz? - preguntó Louis.


-No. A mí también. ¿A alguno de vosotros os suena? - pregunté al resto de chicos y a Bri. Ellos negaron.


-Piensa Niall... ¿dónde pudimos oír esa voz? - preguntó Louis esperanzado.


-No lo sé... - suspiré y tapé mi cara con mis manos. Entonces se me encendió la bombilla - Chicos... creo que sé con quién está _____.


-¿Con quién? - preguntó Brithany.


-Con Ryan - dijimos Louis y yo a la vez. Al parecer, a él también se le había encendido la bombilla.


-¿Ryan? ¿El de la playa? - preguntó Zayn.


-El mismo - dijo Louis con una lágrima en su mejilla - Niall, ¿de qué le conoces?


Suspiré. No tenía ganas de contarles eso, y menos ahora.


-Bueno... Brithany no lo sabe, pero vosotros sí. ¿Recordáis aquella vez que os dije que tenía un primo que había estado en la cárcel por violación? - ellos abrieron mucho los ojos y asintieron, temiéndose lo peor - Ese primo es Ryan.


Me derrumbé. Más lágrimas. Como ese cabrón la tocara, se las iba a ver conmigo.


-Niall... ¿estás seguro de que es ese Ryan? -preguntó Liam esperanzado.


-Conozco a mi primo Liam. Claro que estoy seguro- suspiré - Necesito estar solo - dije. Me levanté y me alejé de ellos. Saqué mi móvil y llamé a _____.


-¿Diga? - dijo Ryan.


-Como le hagas algo a _____ te arrepentirás.


-¿Niall?


-Sí.


-¡Primito! Cuánto tiempo. Deberíamos vernos pronto, ¿no crees?


-Déjate de tonterías. ¿Dónde está _____?


-Lo hace genial, ¿sabes? - dijo. Apreté mis puños - Una lástima que no fuese virgen cuando lo hicimos... Hubiese estado genial.


-No le toques... - le advertí - ¿Dónde está?


-Bueno, llámame otro día. Voy hacia donde está ella a pasárnoslo bien juntos. Hasta luego primito.


-¡No le...! - grité. Pero me colgó.









Me senté bajo un árbol con mi espalda apoyada en su tronco. Entonces vinieron los chicos y Bri.
-Niall, creo que deberíamos llamar a la policía - dijo Harry.
-Pero si lo hacemos, la prensa y las fans no nos dejarán tranquilos - dijo Brithany.
-También podríamos... - susurré, pero nadie me escuchó, ya que estaban discutiendo sobre si llamar a la policía o no - Chicos - les llamé - ¡Chicos!
-¿Qué? - preguntó Louis.
-Podríamos rastrear el móvil de _____ a ver dónde está - dije yo.
-¿Y tú sabes cómo hacerlo? - preguntó Liam. Negué con la cabeza y una mueca triste.
-Conozco una persona que puede ayudarnos - comentó Louis con una sonrisa.


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¡Holaaaaaaaaaa! ¿Qué tal? Nosotraas bieeeeeeeeeen :D Estamos juntitas puajaja. Bueno, esperamos que os haya gustado el capítulo y un besazo a Sara Muñoz no se qué, a Noelia Fajardo y a Espe, las amamos mucho :)